martes, 3 de mayo de 2011

Dadaísmo...

  • Es un movimiento cultural que surgió en 1916 en el Cabaret Voltaire en Zúrich, Suiza. Fue propuesto por Hugo Ball, escritor de los primeros textos dadá; posteriormente, se unió Tristan Tzara que llegaría a ser el emblema del dadaísmo. Una característica fundamental del dadaísmo es la oposición al concepto de razón instaurado por el Positivismo. Dadá se caracterizó por rebelarse en contra de las convenciones literarias y artísticas y, especialmente, por burlarse del artista burgués y de su arte.
  • No era tanto un movimiento artístico como una actitud, una actitud de revuelta y de desprecio, de disgusto frente al orden social existente, caracterizado por una avaricia inhumana y un ansia de poder, y frente al arte tradicional, que había quedado invalidado por el hecho de que la sociedad lo consideró respetable. El bigote y la inscripción obscena en la "Mona Lisa" ilustra perfectamente esta actitud. Los Dadaístas experimentaron diversos estilos artísticos, algunos de los cuales serían desarrollados posteriormente por los Surrealistas. En el período de entreguerras, el Surrealismo (asentado en París y altamente cosmopolita) dominó el mundo del arte y jugó un papel importante en la literatura y en el cine. A partir de mediados de los años 40, muchos de sus reclutas más relevantes vinieron de América.
  • El Dadaísmo surge con la intención de destruir todos los códigos y sistemas establecidos en el mundo del arte. Es un movimiento antiartístico, antiliterario y antipoético, ya que cuestiona la existencia del arte, la literatura y la poesía. Se presenta como una ideología total, como una forma de vivir y como un rechazo absoluto de toda tradición o esquema anterior. Está en contra de la belleza eterna, contra la eternidad de los principios, contra las leyes de la lógica, contra la inmovilidad del pensamiento y contra lo universal. Los dadaístas promueven un cambio, la libertad del individuo, la espontaneidad, lo inmediato, lo aleatorio, la contradicción, defienden el caos frente al orden y la imperfección frente a la perfección.
  • De acuerdo con el escritor Marcos Aguinis, “la revolución dadaísta fue una protesta civilizada que generó frutos, flexibilizó las emociones, multiplicó las lupas y amplió el espacio de la estética”. En tanto, para María Belén Luaces, la insatisfacción es la que impregna la obra dadaísta: “Para Dadá era imposible aceptar el mundo después de la tragedia de la guerra, su ira y su negación fueron creciendo a la par de las bombas y los tanques de doble tracción”. Entre los principales exponentes del dadaísmo encontramos a Marcel Duchamp, Kurt Schwitters, Raul Hausmann, Max Ernst y Jean Arp.

  • Artistas Representativos

Raul Hausmann: Su aportación más importante es el fotomontaje, que consiste, en el montaje, sin plan definido, de recortes de fotografía, periódicos y dibujos, con la intención de obtener una obra plásticamente nueva que asumiera un mensaje político, moral o poético.
En El crítico de arte ofrece la visión de un experto de arte y lo representa desdentado y con un zapato en la cabeza para denunciar la vaciedad y la inutilidad de sus pensamientos.
Kurt Schwitter: Creó ensamblajes de cartón, madera, alambre y objetos rotos, así como collages con diversos objetos, billetes de autobús, envolturas de quesos, suelas desgastadas, colillas, etc.
En su casa elaboró una obra a la que llamó Merz-Säule. Se trataba de una escultura hecha de bultos y concavidades con hallazgos cotidianos o con objetos tomados a sus visitantes como mechones de cabello o uñas cortadas, y que tenía la propiedad de crecer como si fuera un organismo vivo. Cada día le agregaba algo y llegó a crecer tanto que ocupó dos pisos.
Max Ernst: Max Ernst, junto con Baargeld, organizaron una exposición que obligaba al publico a pasar entre unos urinarios, mientras una niña vestida para primera comunión recitaba poemas obscenos.
En medio de la sala se levantaba un gran bloque de madera que sostenía una hacha enganchada por una cadena y se invitaba al público a que destruyera aquel objeto a hachazos. En las paredes colgaban collages de diversos artistas cuyo contenido provocaban malestar entre los espectadores. La exposición fue prohibida.
La Primera Guerra Mundial también llevó a Nueva York a grupos de artistas refugiados como Duchamp o Picabia, que junto con los americanos como Man Ray dan vida al dada neoyorquino.
Marcel Duchamp: Su principal aportación es el ready-made, que consiste en sacar un objeto de su contexto para situarlo en el ámbito de lo artístico. Solo con el hecho de titularlos y firmarlos confería a los objetos la categoría de obra de arte.
En 1913 concibió una obra a partir de una rueda de bicicleta colocada sobre un taburete de cocina. En 1915 presentó un urinario de loza puesto al revés y lo tituló Fontaine.
Man Ray: Realizó un conjunto de obras que llamó "objetos de mi afecto". Entre ellas está Cadeau, que consiste en una plancha de cuya base salen algunos clavos, o la obra llamada La puericultura II, que es una base cilíndrica de bronce en cuya parte superior sobresale una mano color verde.
El movimiento dada construye el ambiente propicio para que surjan otras grandes corrientes, como el Surrealismo, y propone una nueva definición del arte al romper con los esquemas tradicionales integrando objetos del entorno cotidiano dentro de los medios de expresión plásticos. 



  Monalisa
Fuentes de Información


1 comentario:

  1. esta obra no es representativa del dadaismo! no traduce todo lo que decis mas arriba!

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